Óleo de Higorca Gómez
¡Madre
tus pechos duelen
no
puedes amamantar ese bebe
que
llevaste en tu seno
que
pariste con tanto amor!
Escucha
despacio, muy despacio.
-¡Madre,
madre no llores,
miro
y veo tus ojos mojados,
tus
pestañas pegadas de tanto sufrimiento,
madre…
pronto nos encontraremos!
-¡Gracias
por todo lo que me has dado,
por
todo lo que me diste,
gracias
por haberme amado tanto!
Será
un abrazo dulce, como solo tú
madre
del alma… me das.
Mientras
te espero…
¡Ven
pronto necesito tus caricias
tus
besos para poder dormir
para
decirte en un susurro despacio,
al oído!
¡Toma
madre una flor,
toma…
cógela despacio,
que
es mi corazón!
Higorca
– derechos reservados
¡Qué tremendo drama el de Siria! Cuántas madres, cuántos niños, cuántas vidas sufrientes. Tu poema lo describe crudamente y el mensaje llega hasta la médula. El óleo lo dice todo. Está genialmente pintado. Un beso. Higorca.
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